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domingo, 13 de mayo de 2012

HISTORIA DE MARÍA LA BRAVA

LA HISTORIA: MARÍA LA BRAVA
Vivía en Plasencia en la casa de las dos Torres, construida por el Abad D. Nuño Pérez de Monroy, en un solar de esta familia, en el siglo XV.
HIJOS DE LOS RODRÍGUEZ MONROY
Los hijos de don Hernán Rodríguez de Monroy y de doña Isabel de Almaraz fueron doce, entre ellos cinco varones y siete hembras (según manuscrito de Dávila Monroy, folios 33 y 34).
Según Fray Alonso Fernández, trece. "Historia y Anales de la Ciudad de Plasencia". Madrid, 1627, páginas 86 y siguientes).
Los 5 primeros fueron varones y a partir del 6 al 13 fueron mujeres. Muchos escritores apuntan a 12 hijos y es que la 13 según Fray Alonso, puso en sus escritos una hija más que fue la que casó con un caballero de Salamanca del que tuvo un hijo llamado Anaya de Monroy.
María Rodríguez de Monroy Almaraz, novena en la descendencia, contrajo matrimonio con Enrique Enríquez de Sevilla, vecino y Regidor de Salamanca, que compra este señorío a su tía doña Leonor Enríquez, la cual, no tuvo descendencia, siendo el TERCER “SEÑOR DE VILLALVA DE LOS LLANOS”. También fue Señor de Terreros de la Sagrada, Malpica, Aldeanueva, Hormeriego, Compañero, Gallegos, la Canóniga y la Maza, en tierra de Salamanca. Compañero, Gallegos, la Canóniga y la Maza, en tierra de Salamanca.
Villalba de los Llanos pasó de ser señorío a MAYORAZGO, los trataré en otro apartado.

OBSERVACIONES DE INTERÉS
De este matrimonio nacieron los siguientes hijos. Existen textos que le dan dos hijos y otros dos hijos y una hija, mientras que en los libros de descendencia nobiliaria aparecen cinco.



1.-Alonso sigue como CUARTO SEÑOR DE VILLALVA.
2-3.-Luís y Pedro asesinados en la guerra de los bandos en Salamanca

4.-María contrajo nupcias con Alfonso de Monroy, Señor de Tornadizos, progenitores de los Condes de Canillas.
5.-Aldonza Enríquez de Monroy, que casó con Gómez de Anaya, Regidor de Salamanca (hermano, o sobrino, de D. Diego de Anaya, Arzobispo de Sevilla y fundador del insigne Colegio de San Bartolomé, en Salamanca).

 HEMBRA RICA CON RELIEVES TRÁGICOS.

Nadie mejor que el profesor Maldonado de Guevara, para calificar a esta mujer: "María la Brava fue una hembra rica con relieve trágico"
Nacida en familia acomodada, una vez casada, abandonó Plasencia, para vivir en Salamanca.

Perteneciente a familia importante, se enzarza en una guerra, casi interminable, para hacerse con el poder absoluto de Salamanca.

https://youtu.be/Tx0E5Wc2VsQ

Estos eran los dos BANDOS:
Los Manzanos pertenecían a la iglesia de San Benito, lucharon a muerte contra los Monroy pertenecientes a la iglesia de Santo Tomé. Familias como los Solís, Manzano, Maldonado y Monroy, más sus seguidores no cesaron en su empeño de conquistar por la fuerza la hegemonía de la ciudad. Estas luchas tenían aterrorizada a la ciudad. Las cosas empeoraron cuando en una de las reyertas dos hijos de Doña María la Brava: Luís y Pedro (19 y 18 años), pertenecientes al Bando de Santo Tomé, fueron matados por los hermanos Manzanos: Simón y Alonso, rivales defensores del Bando de San Benito, en la Plaza del Corrillo de la Hierba. Aquí se delimitaba el terreno y quien pisaba la hierba estaba condenado a muerte.






La Plaza del Corrillo de Hierba se encuentra como acceso a la Plaza Mayor, cara sur, entre los pabellones pretineros a la izquierda (OESTE) y San Martín a la derecha (SUR), ambas hacen casi esquina.


Cuentan que María la Brava, cuando le hicieron saber el fatal desenlace, partió hacia Villalba a caballo, para proseguir viaje, camino de Viseu al mando de sus leales, dando órdenes estrictas, que dirigiría las operaciones para vengar la muerte de sus hijos. Tras ser localizados los asesinos se comenzó la batida sobre la ciudad lisboeta dio como efecto la muerte de los Manzanos. Una vez los decapitó y los colgó sobre su lanza y galopó hasta Salamanca.
Se dirigió a la Iglesia de Santo Tomé, ubicada, en la actual Plaza de los Bandos, hoy ya no existe, dirigiéndose hacia la tumba de sus hijos. Con carácter frío y vengativo, se postró ante la sepultura de ellos, arrojando las cabezas de los verdugos: Simón y Alonso, como señal de desagravio. Este triste suceso ocurrió el año 1465.
Desde este momento, María Rodríguez de Monroy se le conoció por María la Brava. Teniendo un papel muy activo en la contienda, en la Guerra de los Bandos
Dictó providencia, tras 40 años de intensas guerras, gracias a la intervención del padre agustino, San Juan de Sahagún, paz que se firmó, en la calle San Pablo, hoy conocida como LA CASA DE LA CONCORDIA.

Donde se formalizó la firma existe  una lápida conmemorativa, con esta inscripción latina: "Ira odium generat concordia nutrit amorem"
A los pocos años de firmarse el armisticio, parece ser que,  falleció Dª María Rodríguez de Monroy, conocida por María “La Brava”

JOSÉ ANTONIO RODRÍGUEZ PEÑA